El Sindicato de Enfermería, SATSE, en Andalucía ha exigido al consejero de Salud y Familias en funciones, Jesús Aguirre, que ponga freno de inmediato a la alarmante fuga de enfermeras y fisioterapeutas andaluces a otras comunidades autónomas.
En un escrito enviado hoy mismo a la Consejería de Salud, el sindicato ha pedido al responsable del ramo que ponga todos los medios a su alcance para que las aproximadamente 5.600 enfermeras y fisioterapeutas que acaban sus contratos en octubre y diciembre se reconviertan en contratos de larga duración (interinos vacantes).
SATSE entiende que esta es la única manera y la más eficaz de estabilizar el empleo, fidelizar a los profesionales sanitarios, proteger los recursos humanos del Servicio Andaluz de Salud, ofertar cuidados de mayor calidad a la ciudadanía y, al mismo tiempo, adecuar las ratios de las enfermeras y de fisioterapeutas.
En opinión del sindicato, la pandemia de la Covid-19 ha puesto de manifiesto las deficiencias en materia de recursos humanos del Sistema Nacional de Salud en general y del Servicio Andaluz de Salud en particular.
Durante estos años, SATSE ha solicitado al consejero, en multitud de ocasiones, la necesidad de aumentar la plantilla de enfermeras y fisioterapeutas adecuando así las ratios de nuestra comunidad autónoma a la media de la Unión Europea.
Pese a las continuas reivindicaciones, los contratos realizados por la Consejería de Salud y Familias han sido, de forma reiterada, de corta duración y en precario provocando así la movilidad constante de los profesionales entre centros e incluso entre provincias.
Además de los contratos de corta duración y en precario, hay que recodar que la Bolsa Única del SAS está desactualizada con lo que se está produciendo un alarmante éxodo de profesionales a otras comunidades autónomas en las que se les ofrecen contratos de mayor duración y mayor estabilidad en el empleo.
El Sindicato de Enfermería considera que después de las Elecciones Autonómicas y de la reforma del Estatuto Marco, ha llegado el momento de que el Gobierno de Andalucía dé un giro radical a la política de contratación y de que atienda, de una vez por todas, las justas reivindicaciones de SATSE, el sindicato mayoritario de la Sanidad Andaluza.