Alejandro Jiménez, el hijo de María Jiménez –fallecida esta pasada madrugada a los 73 años de edad–, ha recordado este jueves a su madre como una mujer que «no ha sido una sabionda. Ha vivido y sufrido muchísimo, a tope, y ha llegado al nirvana de su profesión. Eso es lo más bonito».
En declaraciones a los medios tras abrirse la capilla ardiente en el salón del apeadero del Ayuntamiento de Sevilla, el hijo de la artista, nacida en el barrio de Triana, ha subrayado que María Jiménez «apoyó a toda la gente» que se lo pedía, «desde colectivos LGTBI a amigos».
Ha afirmado que su madre «no se ha enterado» de su muerte. «Vino a Sevilla, estuvo de broma ayer –en alusión al miércoles 6 de septiembre– con su hermana con la que se iba a hacer un TAC y directamente no se ha enterado de nada. Ni ella, ni yo ni nadie. Ha sido de sorpresa», ha relatado.
Alejandro Jiménez ha recordado que su madre ha pasado un verano «feliz, con sus nietos, como ella quería». Ha pedido recordarla brindando con una copa y escuchando su música. En este punto, ha señalado que sus canciones preferidas son la versión que hizo María Jiménez de ‘Calle Melancolía’ y uno de sus últimos temas, ‘Vida’, que sonará en su funeral.
Sobre el traslado del féretro desde el Ayuntamiento a la parroquia de Santa Ana en coche de caballos, ha manifestado que «espero que esté conforme». Por su parte, el alcalde de la ciudad, José Luis Sanz, ha confirmado que los servicios municipales urbanísticos están ya buscando un «espacio» en el entorno de la calle Betis, en el barrio de Triana, para dedicárselo a María Jiménez, artista trianera de nacimiento que ha fallecido este jueves de madrugada a los 73 años de edad.
«Es lo lógico» que el espacio esté en Triana, ha defendido el alcalde, para el que la propuesta –que se elevará al próximo Pleno– «se la merece María». «Se merece un espacio en la ciudad que tanto quería y que tanto la quería».
En declaraciones a los medios tras quedar abierta al público la capilla ardiente en el salón apeadero del Ayuntamiento a las 13,00 horas, el regidor hispalense ha lamentado la pérdida de «una artistaza, con una fuerza como no tenía ninguna otra». Sanz ha recordado que María Jiménez reconoció con motivo de la concesión de la Medalla de Oro de la ciudad que fue «uno de los pocos días que lloró en su vida».
El ferétro de la artista sevillana ha llegado a la Casa Consistorial procedente del tanatorio de la SE-30 pocos minutos antes de que se abriera la capilla ardiente, que permanecerá abierta hasta las 22,00 horas. Este viernes, volverá a abrirse al público a las 8,00 y hasta las 10,00 horas, momento en el que el féretro de María Jiménez saldrá del Ayuntamiento en dirección a la parroquia de Santa Ana, en Triana, en coche de caballos, como así lo había expresado la artista.
En Santa Ana se oficiará una misa en torno a las 11,30 horas y, al término de la misma, el féretro será conducido al cementerio de Sevilla en coche de caballos, tal como lo ha detallado Francisco Moreno, presidente de la Fundación María Jiménez, en declaraciones a los medios en el tanatorio de la SE-30.
Entre las primeras personalidades que se han acercado a la capilla ardiente ha estado el periodista Carlos Herrera, que en declaraciones a los medios ha destacado de María Jiménez que «siempre abrió su corazón de manera generosa». La ha calificado como «humanamente incomparable» y como una «artista tremebunda, artista en todo lo que hacía, un volcán incontenible de sentimientos».