Los Centros de Atención e Información de la Seguridad Social informamos a los ciudadanos de manera presencial y también de manera telemática. Como todos los días, sobre las doce de la mañana, después de terminar con las citas previas de atenciones presenciales, comenzamos a llamar por teléfono a aquellas personas que han solicitado cita previa telefónica.
Hoy teníamos cita telefónica con Eduardo. Cuando lo llamo, me pregunta sobre la situación en la que se encontraba su solicitud del Ingreso Mínimo Vital que presentó el 31 de diciembre de 2022.
Después de mirar su expediente, le informo que su prestación está aprobada desde el 15 de enero de 2024 y que la orden de pago se ha efectuado hoy mismo, por lo que los atrasos le llegarán al banco a lo largo de esta semana.
Eduardo, se quedó callado un momento. Cuando por fin rompe el silencio, con la voz medio rota, me da las gracias de corazón y me pide que le traslade al Ministerio de Inclusión su agradecimiento. Y sin quererlo y de manera espontánea, me cuenta su historia.
Me dice que hasta hace unos años estaba trabajando, pero durante la crisis anterior se quedó sin trabajo y desde entonces no había podido levantar cabeza. Después, fue desalojado de su vivienda y, desde entonces, llevaba varios años viviendo y durmiendo en un coche.
Me cuenta que la vida en la calle es muy dura y que había sobrevivido gracias a la solidaridad de las organizaciones no gubernamentales y a que un vecino, cerca de donde tenía aparcado el coche, le invitaba a subir a su piso a ducharse.
Eduardo, de 66 años, me hablaba medio llorando, me dice que le he dado una buenísima noticia, porque con esta ayuda podrá tener una nueva oportunidad y podrá servirle de empujón para salir de esa terrible situación.
Posiblemente a Eduardo le haya alegrado el día, pero el me ha hecho valorar mi trabajo y la importancia de tener un sólido Estado de Bienestar que ayuda a las personas.
Alfonso Muñoz Cuenca
Funcionario de Seguridad Social
Gracias Alfonso por acercarnos a este caso tan cercano y lejano a la vez