Desde hace semanas venidos escuchando que las infecciones respiratorias están tensionando el sistema sanitario de nuestro país pero, sin embargo, en Andalucía parece que está todo bajo control y que la incidencia es inferior a la de años anteriores, o al menos así lo ha confirmado la consejera de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía, Rocío Hernández.
Concretamente, ha indicado que estas afecciones están teniendo una «incidencia menor» en la comunidad autónoma con respecto del mismo periodo del año pasado y en relación con el resto del país, animando en cualquier caso a los pacientes más vulnerables, como personas mayores, a vacunarse.
En este sentido, Hernández ha indicado que se activaba a mitad de octubre en tanto «todos los años por estas fechas» se detecta una mayor incidencia de virus respiratorios, y la planificación sirve para «gestionar» camas y «priorizar determinados servicios» o «reforzar» en base a la demanda y siempre teniendo en cuenta a los pacientes más vulnerables.
En el marco global de Andalucía en ese plan de alta frecuentación se está en fase cero, igual que en provincias como la de Granada, ha indicado Hernández, que ha detallado que, a la espera de la actualización de los datos semanales este viernes, se sigue en una «incidencia menor que la del año pasado por las mismas fechas» y también «menor que la media nacional» tanto en infecciones respiratorias agudas como en infecciones respiratorias agudas graves, las cuales son las que, ha detallado, en un diez por ciento de los casos requieren de hospitalización.
En este contexto la Junta sigue haciendo un «análisis diario y semanal de una serie de parámetros» para anticiparse en lo posible al «pico» de infecciones que pueda darse y gestionar los «incrementos de incidencias puntuales» que ha reconocido se dan en algunos centros «en algunos días y en determinadas horas».
Todo ello «siempre teniendo en cuenta que lo prioritario es la población vulnerable», ha indicado Hernández volviendo a insistir en la necesidad de vacunación para la población de riesgo como pueden ser las personas mayores o con infecciones previas o enfermedades de base, y que «todavía» están a tiempo de vacunarse.