La tasa de riesgo de pobreza o exclusión social en la infancia se situó en Andalucía en 2023 en un 46,8%, la cifra más alta del territorio nacional –seguida de Canarias, con un 37,1%–, con un significativo aumento de 3,8 puntos porcentuales respecto al ejercicio anterior.
Estos datos se extraen del Análisis de la Encuesta de Condiciones de Vida 2024, presentado esta semana por la Plataforma de Infancia, que arroja que Andalucía, junto a Extremadura y Murcia –todas comunidades del sur del país– tienen los índices más altos de pobreza infantil, siendo la región andaluza la que presenta los peores resultados.
La población infantil y adolescente en Andalucía es particularmente vulnerable, con tasas superiores a la media nacional y del grupo de comunidades del sur en términos de pobreza monetaria (42,5%), hogares con baja intensidad de empleo (10,4%) y privaciones materiales severas (14,6%). Es relevante destacar que todos estos factores han aumentado en el último año, siendo el riesgo de pobreza monetaria el que ha experimentado el mayor incremento, con un aumento de 4,4 puntos porcentuales.
Así, Andalucía también presenta una diferencia de 11,5 puntos entre su tasa de riesgo de pobreza o exclusión social en la infancia con los objetivos teóricos marcados por los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS) para 2023.
Respecto a los datos andaluces, el indicador Arope sobre la tasa de riesgo de pobreza en menores de 18 años es 12,9 puntos porcentuales mayor en Andalucía que la nacional, situada en 33,9. En cuanto al porcentaje de menores con carencia material severa también es mayor en Andalucía que en el conjunto del país, con una diferencia de casi cuatro puntos porcentuales. Además, los hogares andaluces con baja intensidad en el trabajo superan en 3,3 puntos a la media de España.
Brecha entre norte y sur
Ante estos datos, la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (Apdha) ha advertido que, a pesar de que las cifras macro en términos de crecimiento económico apuntan a mejoras la situación económica de los hogares españoles «la realidad es mucho más compleja y apunta como, por ejemplo, la infancia y los niños son uno de los colectivos que más sufre la pobreza y la precariedad».
Así, la vicecoordinadora de la entidad, Macarena Olid, ha subrayado que las cifras en este ámbito son «muy preocupantes en el conjunto del Estado Español y realmente aterradoras en Andalucía». «La región no solo tiene 13 puntos porcentuales por encima de la tasa de pobreza infantil que se registra en el conjunto de España, sino que durante el último año este indicador ha subido hasta cuatro puntos, la subida más alta de todo el estado y situando a Andalucía a la cabeza de la pobreza infantil», ha aseverado.
«También nos preocupa mucho que mientras en otros territorios, como Canarias o Murcia, que tradicionalmente tienen elevados niveles de pobreza infantil, esta se ha reducido durante el último año, en Andalucía se ha producido un repunte importante», han recalcado desde la Apdha, toda vez que ha advertido que «esta situación se está produciendo en Andalucía como consecuencia de un modelo productivo que, basado en el sector servicios y sobre todo en el turismo, está extendiendo la precariedad, la temporalidad y los bajos salarios».
En esta línea, han añadido que «la proliferación de viviendas turísticas, y la negativa a ponerle freno, está provocando también enormes dificultades para amplios sectores de la población a la hora de acceder a una vivienda digna y asequible».
Por último, Olid ha puesto de relieve que este informe muestra «una importante brecha económica y social» entre el norte y el sur «que se está agravando como consecuencia de ese modelo productivo extractivista que existe en Andalucía, pero también como consecuencia del desmantelamiento de los servicios públicos, Sanidad y Educación fundamentalmente». «Nos preocupa enormemente que la pobreza se hereda de generación en generación y que, con esos graves recortes que tienen lugar en nuestro sistema de sanidad pública y en el sistema educativo, esa brecha social se agrande aún más», ha concluido.