Andalucía es una de las comunidades más beneficiadas por el plan de quita de deuda que ha propuesto la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, al conjunto de las comunidades autónomas. En términos absolutos, la cifra de 18.791 millones de euros que se condonaría a la región andaluza es la más alta del reparto, representando casi el 49% del pasivo que arrastraba la Junta de Andalucía en 2023. A pesar de ello, el Gobierno de Juanma Moreno ha señalado que no solicitará esta quita, postura que también comparten otras comunidades gobernadas por el PP, como la Comunidad Valenciana.
El plan de condonación de deuda, que afecta a las regiones con pasivos contraídos principalmente a través del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), se distribuye de la siguiente manera: a Andalucía le corresponderían 18.791 millones, seguida de Cataluña con 17.104 millones, Madrid con 8.644 millones y la Comunidad Valenciana con 11.201 millones de euros. En total, el Gobierno español condonará 83.252 millones de euros de deuda a las comunidades autónomas.
Este ajuste, que fue presentado por la ministra Montero, se basa en una metodología que calcula el impacto de la crisis financiera en las finanzas autonómicas entre el 31 de diciembre de 2009 y el 31 de diciembre de 2013. El 75% de la cantidad corresponde a la población ajustada de cada comunidad, mientras que el resto se asigna como condonaciones adicionales para acercar a las comunidades menos favorecidas a la media.
Aunque el Gobierno de Pedro Sánchez defiende que esta medida beneficia a todas las comunidades, al reducir sus intereses, mejorar su ratio de deuda y fortalecer su autonomía financiera, el Gobierno andaluz se mantiene en contra. Juanma Moreno y otros dirigentes del PP sostienen que la quita favorece principalmente a comunidades con deudas más elevadas, como Cataluña y la Comunidad Valenciana. A pesar de los beneficios potenciales en términos de capacidad de endeudamiento, la condonación sigue siendo vista como un acuerdo político que responde al pacto firmado por el PSOE con ERC para la investidura de Pedro Sánchez, lo que genera controversia en algunas regiones.
Por su parte, Montero ha destacado que «todas las comunidades ganan» con esta medida, ya que el ahorro de intereses y la reducción de deuda mejoran la autonomía financiera de las regiones para futuras solicitudes de financiación en los mercados privados. Además, la ministra ha señalado que la metodología empleada es objetiva y se aplica de manera uniforme para todas las comunidades autónomas.
En cuanto a las críticas, Montero ha hecho un llamado a mantener un debate “constructivo y positivo” en el próximo Consejo de Política Fiscal y Financiera. Además, la vicepresidenta primera ha señalado que sería difícil de entender para los ciudadanos que las comunidades rechacen una medida que, en su opinión, aporta beneficios tangibles para las finanzas autonómicas.
El acuerdo de condonación de deuda forma parte de las condiciones pactadas con ERC durante la investidura de Pedro Sánchez y tiene un impacto directo en Cataluña, que verá perdonados 17.104 millones de euros, lo que representa el 22,2% de su deuda con el Estado a través del Fondo de Liquidez Autonómica.




