José Antonio Casanueva, abuelo de Marta del Castillo, la joven sevillana por cuyo asesinato fue condenado Miguel Carcaño a 21 años y tres meses de cárcel, cuenta ya con permiso de las autoridades para celebrar a las 11 horas del próximo 24 de enero una concentración ante la Audiencia de Sevilla, para conmemorar los 15 años transcurridos desde el crimen y reclamar avances en la investigación del paradero del cadáver de la víctima, para lo cual la Policía Nacional trabajaría ya sobre los resultados del informe pericial informático encargado sobre los datos crudos del teléfono móvil de Carcaño.
José Antonio Casanueva ha informado de que el lunes de la próxima semana comenzará ya la pegada de carteles anunciadores de esta concentración en el barrio de Tartessos, donde residen los padres de Marta del Castillo; el entorno urbano de la calle Arroyo y en el Polígono San Pablo, precisando eso sí que en principio no está prevista la asistencia de Antonio del Castillo y Eva Casanueva al acto.
Ya en enero de 2023, recordémoslo, el abuelo de Marta encabezaba un recorrido silencioso y una ofrenda floral ante los juzgados del Prado de San Sebastián, para conmemorar el 14 aniversario del crimen, con el aviso de que «los cinco implicados saben dónde está el cuerpo» de la víctima, aún pendiente de recuperar.
Ello, en un marco en el que la Policía Nacional estaría ya operando respecto al contenido del informe pericial encargado a una empresa especializada sobre los «datos crudos» del teléfono móvil de Carcaño, un estudio que habría detectado posiciones del autor del crimen hasta ahora no incluidas en la investigación del caso, según el responsable de la confección de dicho informe.
Meses atrás, la familia de Marta del Castillo lamentaba por cierto que por mor del Juzgado de Instrucción número cuatro, dicho estudio se centraba en «un único teléfono», el de Carcaño, rememorando que el juez instructor del caso se «retractó» de su decisión inicial de que esta prueba pericial incluyese los móviles del hermano de Carcaño, Francisco Javier Delgado; de la novia de este, María García Mendaro; del amigo de Carcaño Samuel Benítez y de Francisco Javier García, alias «El Cuco».
Revisión judicial
A la hora de ordenar en abril de 2021 esta prueba pericial, recordémoslo, el juez instructor Álvaro Martín precisaba en su auto emitido al respecto que el objeto de esta causa es «la comprobación, si ello fuese posible, del lugar en el que se encuentra el cuerpo de la víctima, única razón del mantenimiento de la presente pieza, sin que a través de ella pueda alcanzarse a una revisión de lo ya enjuiciado, ni a la ampliación de la instrucción».
En ese sentido, recordemos que el juicio celebrado en 2011 contra los mayores de edad acusados por el asesinato de Marta del Castillo y la desaparición de su cadáver se saldó con la condena de Carcaño y la absolución del resto de adultos acusados, que eran su hermano Francisco Javier Delgado, María García Mendaro y Samuel Benítez.
En el caso del Cuco, menor de edad a la fecha de los hechos, fue condenado por un juzgado de Menores a tres años de reclusión en un centro por encubrir el asesinato; si bien en 2022 un Juzgado de lo Penal le condenó junto a su madre a dos años de cárcel por un delito de falso testimonio en las comparecencias de ambos como testigos en el juicio contra los adultos.
El Cuco recurre su sentencia
La Audiencia de Sevilla, en ese sentido, tiene pendiente resolver los recursos de apelación de ambos condenados contra la sentencia del Juzgado de lo Penal. De momento, ha denegado la petición planteada por la defensa del Cuco en demanda de que la misma celebrase una vista oral «en segunda instancia» sobre los recursos, zanjando que las impugnaciones «se resolverán sin necesidad de un nuevo juicio oral».
En cualquier caso, con respecto a esta diligencia relativa a la localización del cadáver de la víctima, pesa según el auto emitido en abril de 2021 por juez instructor «la afirmación del penado Miguel Carcaño de haber autorizado la práctica de las diligencias interesadas respecto del teléfono o teléfonos de los que fuese titular, de modo que cabe, para él y sólo para él, entrar a valorar la idoneidad de la medida interesada», pues «cabe la posibilidad de que de esta pericial resulten indicios de la posible ubicación del cuerpo de la víctima, como señala la parte y la propia Policía Nacional».