La portavoz parlamentaria, Ángeles Férriz, ha afirmado hoy que al presidente de la Junta de Andalucía “se le ha acabado el chollo de hacer contratos a dedo con la sanidad privada”.
Según ha criticado la portavoz este tipo de contrataciones irregulares es el modus operandi habitual del PP, “marca de la casa”, que consiste en desmantelar y recortar en la sanidad pública y darle ese dinero a la sanidad privada. Férriz ha lamentado que el Partido Popular se dedica a regar con cientos de millones de euros públicos a sus amigos de la sanidad privada, mientras deja a la mayoría de la sociedad una sanidad pública mediocre. Una realidad incuestionable de la que “Moreno Bonilla tendrá que dar muchas explicaciones” porque estamos ante algo gravísimo.
Según ha explicado Férriz ha sido el propio Gobierno andaluz quien “admite que lleva dos años contratando a dedo, sin control, sin fiscalización”. “Fue el 9 de mayo de 2021 cuando el Gobierno central deroga el decreto que permitía contrataciones por emergencia Covid y aún sabiendo esto, Moreno Bonilla sigue contratando a dedo, sin control” ha afirmado la portavoz socialista.
Por eso, se ha preguntado que si existían circunstancias graves desde el punto de vista sanitario que permitía contrataciones irregulares, “cómo es que ese mismo día echaban a 8.000 profesionales sanitarios a la calle” ha destacado.
Ángeles Férriz ha anunciado que el Grupo Socialista va a pedir toda la información específica en el Parlamento para aclarar cuestiones como “¿cuánto hemos pagado por esos servicios a la privada?, ¿estaba acorde a los precios del mercado?, ¿quién ha decidido lo que se ha pagado? y ¿quién se ha beneficiado?” porque “hay responsabilidad política en este asunto mientras Moreno Bonilla está muy callado y tiene que dar explicaciones” ha afirmado Férriz.
La realidad es que hay “243 millones de euros dados a dedo a amigos de Moreno Bonilla mientras desmantelaba la sanidad pública” mientras los ciudadanos sufrían listas de espera interminables, falta de especialistas, ambulatorios y quirófanos cerrados y eso se merece explicaciones urgentes del Gobierno andaluz, ha concluido la portavoz.
«Desvergüenza política»
Por otro lado, desde el PSOE provincial de Jaén, Férriz ha calificado de “desvergüenza política” la campaña puesta en marcha por la Junta de Andalucía en los centros de salud donde “les echa la culpa a los pacientes de la lista de espera” en la Atención Primaria.
“La Junta tiene que hacer menos campañas para regañar a los pacientes y más campañas para reforzar la sanidad pública, mejorar la Atención Primaria y agilizar los plazos de atención en los centros de salud”, exige Ángeles Férriz.
La parlamentaria socialista dice que esto es “el colmo de la desfachatez”. “La Junta dando citas para dentro de 10 días en los centros de salud a pacientes que necesitan ser atendidos por su médico en un plazo razonable y encima les reprocha que no anulen la cita. A esto se dedica ahora Juanma Moreno: a regañar a los pacientes en vez de garantizarles una atención sanitaria de calidad. Es vergonzoso”, resume.
La parlamentaria socialista ve “insultante” que la Junta haya colocado en centros de salud de Jaén carteles con el número de citas que dice que no se anulan para “echarle la culpa a los propios ciudadanos de los retrasos en la atención”.
“Es aún más ofensivo que lo haga en centros de salud donde se siguen dando citas con más de una semana de espera, lo que lleva al paciente a aguantarse hasta que pasa su dolencia, a irse a Urgencias o a marcharse a la privada. En medio de esta situación, la Junta se enfada porque el paciente no se acuerda de anular la cita. Es una broma de mal gusto por la que Juanma Moreno debería ponerse colorado”, critica.
Férriz indica que está claro que el PP “ha llegado a la Junta de Andalucía para arrollar la sanidad pública” y con ese propósito “no tiene ningún problema en despreciar a los profesionales e insultar a los pacientes”.
“Puño de hierro para los ciudadanos y guante de sede para la sanidad privada, a la que han desviado más de 117 millones de euros con contratos a dedo amparándose en un decreto Covid que ya estaba derogado”, recuerda.
A esto hay que sumar el intento de la Junta de privatizar la Atención Primaria y de poner los hospitales públicos al servicio de los profesionales privados para que éstos pudieran realizar allí pruebas diagnósticas y operaciones. “A Juanma se le ve el plumero cada vez más”, sentencia.