A punto de entrar en «Nueva Normalidad» el uso de mascarilla se hace obligatorio en ciertos lugares públicos y cuando no se puedan mantener los 2 metros de distancia entre personas.
Paradójicamente, cuando ahora no se cuentan los casos por miles, sino por apenas los que pueden contar una mano, se ha sabido que en las últimas horas se han impuesto más de 70 sanciones por no usar la mascarilla en lugares públicos.
La desescalada en plena Fase III en Málaga trae consigo casi la total libertad, justo antes de entrar en los que los políticos llamarán a la «Nueva Normalidad», que será el estado en el que nos encontremos hasta que acabe la alerta sanitaria.
Puede ser porque durante meses nos han dicho por activa y pasiva que la mascarilla no era necesaria cuando más fuerte nos golpeaba el virus, que mucha gente hace caso omiso de la recomendación de llevarla y de la obligación cuando no se puedan respetar las distancias o en sitios de pública concurrencia donde sí es obligatoria indistintamente de la afluencia.
70 malagueños se han enfrentados a sanciones de la Policía Local de la capital por no hacer uso de la mascarilla, que se sumaran a las más de 10.500 interpuestas desde el inicio del Estado de Alarma.