Durante la presente época de rebajas en verano, la Unión de Consumidores de Andalucía (UCAUCE) ha presentado un informe con las tendencias y las previsiones de gastos de la población andaluza, a través de datos globales a nivel autonómico y en concreto para cada provincia.
En esta información la UCAUCE también se traslada las indicaciones, consejos y recomendaciones para afrontar con garantías este período estival de compras.
Los datos del informe apuntan que el 81% de los encuestados tiene pensado realizar alguna compra en las rebajas de verano, un porcentaje que casi duplica a las previsiones del pasado año. Además, han sondeado las tendencias de gasto para esta temporada de rebajas de verano 2024 y constamos se basan, por lo normal en variados factores económicos y sociales, detectándose algunas de las siguientes observaciones generales.
Entre ellas, las compras en línea, de las que se espera que el crecimiento siga siendo una tendencia importante. La comodidad y la variedad de opciones y precios en línea están llevando a un aumento constante en las ventas en Internet durante las rebajas.
Respecto a las prendas de vestir, calzado y accesorios o complementos, suelen ser los productos más buscados durante las rebajas de verano. Las tiendas de modo suelen ofrecer descuentos significativos en artículos de plena temporada, lo que atrae a muchas personas consumidoras.
En lo que se refiere a los dispositivos electrónicos, como teléfonos móviles, tabletas y accesorios relacionados, se están haciendo cada vez más populares durante los períodos de rebajas. Además, otros productos de tecnología, como auriculares, relojes inteligentes y dispositivos para el hogar también estan experimentando una alta demanda.
Finalmente, durante las rebajas es también habitual que muchas personas consumidoras busquen artículos para el hogar como muebles, decoración, electrodomésticos y textiles. Las ofertas en estos productos suelen ser muy atractivas para quienes deseen renovar su espacio habitacional.
En cualquier caso, desde la UCAUCE recuerdan que la intensidad de estas tendencias puede variar según los territorios de nuestra comunidad autónoma (rural o urbano) y la situación económica y social. En este sentido, la previsión de gasto medio se situará en los 69 euros, lo que representa un incremento de en torno al 10% respecto al dato de 2023 (63 euros).
Por provincias Almería (77 euros), Málaga (76 euros) y Córdoba (75 euros) son las que más prevén gastar. Por el contrario Cádiz (60 euros), Huelva (61euros) y Jaén (63 euros) son las que prevén menos gastos en rebajas. En una posición intermedia se sitúan Sevilla (72 euros) y Granada (67 euros). Todas las provincias andaluzas experimentan este año un incremento en sus previsiones de gasto, respecto a 2023.
Como viene siendo tradicional, por sectores de gasto, el textil sigue estando a la cabeza, y representará más del 70% del gasto previsto, seguido por el calzado y los complementos con un 12%. Juntos representan el 82% de la previsión del gasto en rebajas. Los siguientes sectores de gasto en rebajas serían los relacionados anteriormente.
Como viene siendo habitual desde UCAUCE recuerdan a las personas consumidoras una serie de consideraciones a fin de paliar el desconocimiento y la incertidumbre que existe sobre la regulación de las rebajas.
De entrada, con la normativa vigente, “las ventas en rebajas podrán tener lugar en los periodos estacionales de mayor interés comercial, según el criterio de cada comerciante”, el cual podrá decidir también libremente la duración de cada periodo.
Asimismo, señalan las principales normas aplicables a las ventas en rebajas. En cuanto a las condiciones generales de venta: si el establecimiento admite devoluciones durante toda la temporada, también debe hacerlo en época de rebajas; si el establecimiento admite el pago con tarjetas durante el resto del año, también debe aceptarlo durante el periodo de rebajas.
Respecto a la información y publicidad: cuando se anuncia una venta en rebajas, el establecimiento debe disponer de existencias suficientes de productos idénticos para ofrecer al público en las mismas condiciones prometidas. No podrá anunciarse la venta en rebajas de un establecimiento comercial cuando afecte a menos de la mitad de los productos ofrecidos en el mismo, sin perjuicio de que pueda anunciarse la de cada producto o artículo en concreto. Además, tanto en la publicidad de estas ventas como en la información ofrecida a los consumidores, se deben indicar las fechas de comienzo y el final de las mismas.
También se refieren a los precios de los productos rebajados. En este sentido, las reducciones de los precios se consignarán exhibiendo, junto al precio habitual y sin superponerlo, el precio rebajado de los mismos productos o idénticos a los comercializados en el establecimiento. Cuando se trate de una reducción porcentual de un conjunto de artículos, bastará con el anuncio genérico de la misma sin necesidad de que conste individualmente en cada artículo ofertado.
En cuanto a la separación de los productos rebajados, cuando las ventas en rebajas no afecten a la totalidad de los productos comercializados, los rebajados estarán debidamente identificados y diferenciados del resto. Además, cuando se efectúe al mismo tiempo y en el mismo local ventas en rebajas y de saldos o en liquidación, deberán aparecer debidamente separadas con diferenciación de los espacios dedicados a cada una de ellas.
Finalmente en cuanto a los artículos que no pueden ser vendidos como rebajas, los que estén deteriorados por alguna causa, ya que éstos son los considerados saldos, los adquiridos expresamente para esta finalidad y los que no estuvieran dispuestos en el establecimiento para la venta al consumidor con un mes de antelación a la fecha de inicio de la venta en rebajaas.
Respecto del cumplimiento de estas previsiones legales, un reciente informe presentado por la Unión de Consumidores de Málaga (UCAUCE) ha puesto de manifiesto detalles como que el 65% de las personas encuestada constata anomalías o problemas en los establecimientos que visitan durante la campaña de rebajas; que el 62,5% perciben que los descuentos no eran reales y que el precio de origen había sido incrementado previamente; y que el 12,5% considera que los criterios sobre devoluciones y cambios son modificados en algunos establecimientos durante los períodos de rebajas.
Finalmente y, en términos generales, el 75% piensa que en rebajas tiene lugar una mayor vulneración de los derechos de las personas consumidoras, considerando que se deberían penalizar o sancionar, por parte de la administración de consumo, a aquellos comercios que no respetan en rebajas los derechos de las personas consumidoras.
Consejos
Como primera regla, desde UCAUCE se aconseja a las personas que acudan a las rebajas no realizar gastos superiores a su presupuesto o a los permitidos por la situación de la economía familiar. Para ello es fundamental realizar una lista previa y comprar sólo lo necesario, controlar el gasto que se va realizando, no dejarse llevar por el impulso y evitar ir de compras como forma de ocio.
Otra precaución fundamental es la de elegir productos seleccionados antes del comienzo del periodo de rebajas, lo que permite conocer el precio anterior a la rebaja y evitar caer en la compra de productos de escasa calidad adquiridos expresamente para estas fechas por los comerciantes.
En cualquier caso, desde UCAUCE se hace un llamamiento a los consumidores para que no olviden que la rebaja es de precios y no de derechos, haciendo valer los mismos en época de rebajas.
Finalmente, desde UCAUCE aconsejan que hay que comprobar que la calidad y la garantía del producto sean las mismas que en cualquier otra época del año; los productos de temporada son los únicos que se pueden ofertar en rebajas y lo normal es que hayan permanecido en la tienda antes de dichas rebajas; en la etiqueta debe constar el precio antiguo y rebajado; las formas de pago deben ser las mismas que en cualquier otro periodo; el ticket de compra o factura es imprescindible para realizar una devolución o reclamación. Además los comercios se encuentran obligados por ley a facilitarlo siempre; los productos rebajados deben estar claramente identificados y separados de los que no estén rebajados, para evitar con ello confusiones a los clientes; los elementos con taras, desfasados o con deterioros, deberán identificarse como saldos; hay que prestar especial atención al régimen de cambios o devoluciones que establezca el comercio, puesto que, salvo en caso de productos defectuosos, no tiene obligación de aceptarlo más que en las condiciones en que se haya informado al consumidor. Por ello es bueno informarse previamente de la política de devoluciones del establecimiento; la persona consumidora tiene el derecho de pedir la hoja de reclamaciones si no está conforme. Los comerciantes se encuentran obligados por ley a facilitarla y en caso contrario se podrá denunciar al establecimiento ante las autoridades competentes en materia de consumo; y tanto en rebajas como en cualquier otro periodo de compras es recomendable optar por comercios adheridos al Sistema Arbitral de Consumo.
Recuerdan desde UCAUCE que la venta de saldos en lugar de productos de temporada rebajados, la ausencia o incorrecciones en el etiquetado o la limitación de los derechos de las personas consumidoras son los motivos de reclamación más frecuentes, aunque no los únicos.