Debido al «desgaste de la lucha por conseguir un acuerdo y la retirada de la proposición de ley» de lo que tanto se ha hablado en los últimos meses, Miguel Delibes ha renunciado esta mañana a su cargo como presidente del Consejo de Participación de Doñana.
Delibes aseguraba a los medios en torno al Consejo de Participación, que ha sido por «petición propia» y se ha mostrado satisfecho por el trabajo realizado, aunque ha advertido que «eso no hace que Doñana esté mucho mejor», sino que «hay que trabajar por lo menos el doble y el doble de rápido».
Tras más de 11 años al frente del cargo, Delibes ha apuntado que «la verdad es que lo pedí yo, estoy cansado. Fue un desgaste personal grande para mí la lucha por conseguir un acuerdo y la retirada de la proposición de ley que iba a cambiar los regadíos en el entorno de Doñana y ahora mismo tengo la sensación de que, como las cosas son difíciles y van despacio, hace falta una persona con más energía, con más fuerza, para dar ese empujón adicional que creo es necesario», ha expresado.
En este sentido, ha enfatizado que tiene «una sensación a ratos incómoda de que podemos haber entendido la paz que se ha generado a través del acuerdo como un fin, cuando era solo un medio para conseguir un cambio para mejor en la comarca».
«Las cosas van bien, el secretario de Estado, Hugo Morán, ha dicho que estamos dentro de los planes de las previsiones temporales, pero mi sensación es que hay que correr más», ha añadido.
«Esa es mi sensación respecto a Doñana. Hemos corrido mucho, nos hemos desgastado mucho, yo he dejado muchos pelos en la gatera, que se dice, para conseguir el acuerdo del que ahora disfrutamos y que festejo porque hay una tranquilidad que permite trabajar mejor y que es muy positiva para todos. Pero eso no hace que Doñana esté mucho mejor. Hay que trabajar por lo menos el doble y el doble de rápido», ha subrayado.
Así, ha agradecido las palabras del consejero de Sostenibilidad y del secretario de Estado por su despedida, pero ha insistido en que «lo más importante» es que el Consejo «siga funcionando».
«Hoy es un consejo más, el relevo del presidente es algo normal. Yo he estado algo más de once años, que es mucho tiempo de lo normal. Ha sido un honor para mí, pero estoy convencido de que el Consejo de Participación es el marco más idóneo para forjar acuerdos que luego se puedan desarrollar en otros sitios, es verdad que no es ejecutivo, pero puede facilitar las cosas para que disminuya la tensión y se trabaje con más comodidad», ha manifestado.
En este sentido, ha señalado que lo que más recuerda de su etapa es que se encontró una Doñana «ilusionada con llegar a un acuerdo que fue obtenido casi por unanimidad sobre el plan de los regadíos en el entorno», el Plan de la Corona Forestal, que luego «debo decir, y ya lo he dicho más veces, ante mi sorpresa, pues ha sido más respetado y valorado por quienes no lo votaron entonces que por quienes lo habían votado», toda vez que ha insistido en que «todo el mundo parecía congratularse de aquello», pero «no lo hemos desarrollado como deberíamos».
«Por lo demás, Doñana se ha ido fijando. El cambio climático global, mundial, no ayuda. Llevamos unos once años, casi tantos como yo en la Presidencia, de sequía prolongada y esto hace que la urgencia por trabajar cambiando la dinámica de las cosas sea cada día mayor. Por ello, hace falta alguien más que empuje, que recuerde, que aparezca, que llame la atención, que presione desde este consejo de participación», ha señalado.
Al respecto, ha indicado que «hay una hoja de ruta», que es el plan de la Corona Forestal de Doñana y «unos marcos que ha propuesto el Ministerio y la junta para facilitar que ese decreto se cumpla ayudando a los agricultores», pero «tiene que correr más probablemente asumiendo riesgos».
«Entiendo que es difícil, sé que es muy complicado, yo mismo no tengo claro cómo habría que hacerlo, si lo tuviera probablemente seguiría en el Consejo de Participación, pero creo que entre todos lo podemos abordar. Lo que creo es que hay que reconocer la situación, asumir riesgos para avanzar más deprisa para revertirla», ha finalizado.